Es muy sabido que una de las primeras tareas que todo régimen dictatorial y opresivo debe realizar para ser exitoso en su labor de “lavado de cerebro” a sus adherentes y víctimas, tiene que ver con el “esconder su pasado o borrarlo completamente de la historia”.
Esta labor es muy minuciosa. Requiere de una sincronización organizacional fuera de lo habitual y muy pocas veces se logra por mucho tiempo. Menos hoy en día, en este siglo, que la información está al alcance de todos, para mala suerte del cuerpo gobernante desde luego.
Esta semana, mis infiltrados en la madre organización me han enviado desde Betel el nuevo DVD -ya mancionado en el título de esta entrada- y ví lo que esperaba ver: un patético intento por borrar, tapar, encubrir, olvidar, disimular, torcer, etc. etc. etc. la vergonzosa historia de los falsos profetas y maestros que crearon y le dieron la forma a lo que hoy son los Testigos de Jehová: Charles T. Russell y Joseph F. Rutherford.
Solo quiero recalcar dos cosas acerca de este nuevo DVD:
1.- Me gustaron las recreaciones y dramatizaciones. Para ser amateurs, estos “actores” estuvieron bastante creíbles. Muy buen vestuario además.
2.- Fue chistoso ver como, cada vez que los locutores (casi todos miembros del cuerpo gobernante) decían que estos dos personajes encontraban, defendían, enseñaban o predicaban la “verdad de la Biblia”, se mostraban imágenes de falsas enseñanzas o aberrantes prácticas que hoy causarían la expulsión si algún testigo se atreviera a creerlas o peor aún… practicarlas.
A propósito, ¿Cuánto recaudará la watch tower por este nuevo instrumento de propaganda?