Me acuerdo de Ana, la sufrida esposa de Elcaná y posterior madre de Samuel, quien "derramó su corazón delante de Jehová" y delante del payaso de turno -averigua quien era- por estar sin hijos.
Quizas digas: "Eso es dejar las cosas en manos de Jehová" y estás en lo correcto chaparrón! El payaso de turno no tuvo nada que ver en el asunto; fue realmente Jehová quien abrió su matriz.
Por el momento, la pobre "ovejita" que esta esperando y confiando calladamente el ser protegida, es realmente trasquilada por la indiferencia de sus "protectores".
Dejar las cosas en manos de Dios, se ha convertido desde hace mucho tiempo, en una frase que salva de las preguntas de los deseperados por justicia dándoles una olímpica aspirina que logra a medias callarles la boca. Junto a eso, las conciencias de tales monstruos se insensibiliza cada vez más.
Esperas y esperas y esperas y cuando has esperado mucho, todo el problema ya esta "olvidado" y claro, debes reconocer que "Jehová ha actuado sobre tí dandote tranquilidad de espíritu". ¿Que clase de aberración es eso? ¿Tan imbéciles parecemos los casi 7 millones? Siempre ha sido la política de la wt el dejar pasar "tiempo y tiempos y la mitad de un tiempo" para que las cosas se "calmen" y se "olviden". A ese "modus operandi", le han bautizado con el grandilocuente nombre de: "Dejar las cosas en manos de Jehová". ¡Sacó brindis la wt por lo patética que es!
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